lunes, 30 de enero de 2012

¡COMIENZAN LAS VOTACIONES PARA ELEGIR EL FINAL MÁS ADECUADO PARA LA HISTORIA "HILO ROJO DEL DESTINO"!

Hola a tod@s!, como dice el título de esta entrada, hoy comienzan las votaciones y las mismas terminarán este viernes.

Deciros que tienes que dejar tu voto aquí mismo, como un comentario. Añadir que los comentarios dejados como "anónimos" no será válidos.

En el margen izquierdo del blog aparecen los enlaces de los 5 fantásticos finales que participan en este reto, tejiendo un cuento.

Saludos y feliz comienzo de semana!!!

Pd: Gracias Déborah F. Muñoz, María OB, PukitChan, Nina Neko y Hada Fitipaldi por participar!!!

164. ALISON MACGREGOR

Hola de nuevo a tod@s!, aquí les traigo a otra escritora-bloggera que quiere ser parte del club, y cómo no, la he recibido con los brazos abiertos... Ella es:


ALISON MACGREGOR

Y éste es su único blog, uno muy completo y muy bonito:



Ficha:

Soy Alison MacGregor y, antes que escritora, soy una apasionada lectora de romántica. Adoro cada uno de los subgéneros que se encuentran en la romántica, pero, sin duda, la piel se me pone de gallina con lo paranormal y medieval.
 

Es por ello que cuando me decidí a escribir, lo hice con el subgénero medieval. Y, cómo no, tengo una gran saga paranormal pensada en mi cabeza.
 

Este es mi blog, El Cofre de la Pasión ( http://elcofredelapasion.blogspot.com.es/ ), donde subo los relatos que escribo, que principalmente son románticos-eróticos, así como las reseñas de libros que haya leído.
 

Estos son los enlaces que llevan a cada uno de mis relatos:
 

-Fresas y Nata: En Wattpad (http://www.wattpad.com/6373518-fresas-y-nata); y en mi blog (http://elcofredelapasion.blogspot.com.es/search/label/Fresas%20y%20Nata)
 

-Con Chocolate: En Wattpad (http://www.wattpad.com/6376042-con-chocolate#.UdsGzW1tbWE); y en mi blog (http://elcofredelapasion.blogspot.com.es/search/label/Con%20Chocolate)
 

-Tomada por su Deseo: En Wattpad (http://www.wattpad.com/6418397-tomada-por-su-deseo); y en mi blog (http://elcofredelapasion.blogspot.com.es/search/label/Tomada%20por%20su%20Deseo.)
 

-Bañada por su Esencia: En Wattpad (http://www.wattpad.com/6489431-ba%C3%B1ada-por-su-esencia#.UdsHgW1tbWE); y en mi blog (http://elcofredelapasion.blogspot.com.es/search/label/Ba%C3%B1ada%20por%20su%20Esencia.)
 

-Esclava: En Wattpad (http://www.wattpad.com/14153871-esclava); y en mi blog (http://elcofredelapasion.blogspot.com.es/search/label/Esclava.)
 

-Completamente Suyo: En Wattpad (http://www.wattpad.com/14200784-completamente-suyo); y en mi blog (http://elcofredelapasion.blogspot.com.es/search/label/Completamente%20Suyo.)
 

-Podéis encontrarme en Facebook, Alison MacGregor, y por email, alisonmacgregor@hotmail.es
 

Es un placer ser socia, y más haber conocido a Dulce en este gran blog.

domingo, 29 de enero de 2012

SOBRE EL RETO: LAS DOS CARAS DE UN MISMO CUENTO (Edito)

Decirles que ya tengo 7 grupos de dos personas cada uno y son los siguientes:

Grupo 1:

-Astarielle y Déborah F. Muñoz

Grupo 2:

-Paty C. Marín y MariJose

Grupo 3:

-Natalia y Mari

Grupo 4:

-Memetin y Melii

Grupo 5:

-Luz y Mircea

Grupo 6:

-PukitChan y Nina Neko

Grupo 7:

-Ariusk y Hada Fitipaldi

Como ven, me falta una voluntaria que quiera participar en este nuevo reto, ¿quieres ser tú?. Si es así, hazmelo saber por medio de un comentario en esta entrada y si eres la primera en ofrecerte, el puesto es tuyo.

Ahora, volviendo al tema de este reto, aquí os dejo las bases y las fechas:

*El relato no debe de superar las 5 páginas.

*Deben de haber como mínimo 2 personajes principales.

*La que escriba el primer relato, debe de enfocarlo desde el punto de vista de uno de ellos. Y la otra, su compañera, deberá moldear dicho relato enfocado desde la perspectiva del otro personaje.

*Las que hagan el relato principal (el que luego sus compis tendrán que modificar), deben de entregarlo antes del día 10 de Febrero. Añadir que las que se encargarán de esto son aquellas socias que están de color de rojo y, por lo tanto, ya pueden empezar a escribirlo.

*Publicaré los relatos según el orden de llegada.

Y creo que eso es todo, si veo que me falta añadir algo más, ya os avisaré.

Saludos!!!

163. EMMA BUFEI

Hola a tod@s!, como ven, un día más os traigo a otra escritora-bloggera que pasa a ser parte del club como socia, y ella es:


EMMA

Y de sus dos blogs, en éste es dónde publica sus historias cortas sobre un personaje femenino que recibe el mismo nombre que su nick, y posts con sus opiniones sobre diferentes situaciones de la vida:




Aquí les dejo el link donde publica las historias de su personaje Emma, aunque más que un personaje es su alter ego y sus historias tienen algo muy de ella, de la autora... ¿Dónde se diferencian las dos? Léelo y descubre el secreto...:


Y aquí donde publica sus discertaciones:

sábado, 28 de enero de 2012

162. LILIAN (Laura)

Hola de nuevo a tod@s!, hoy les traigo a la nueva socia que con tanto gusto, tengo el placer de presentarles:




LILIAN

Y este es su único blog:


Y estas son sus historias:


"CON EL CORAZÓN ROTO": Olivia es una joven hermosa, rebelde y temeraria que vive en el pueblo texano de Streetman en el año 1848. Son tres los hombres que sienten una gran atracción hacia ella. Son sir Kyle, el aristócrata inglés dueño del rancho en el que trabaja Olivia como peón; Greg, un antiguo pretendiente; y Jack, un apuesto compañero de trabajo de Olivia, infelizmente casado con Danielle. Gran parte del argumento de esta historia está escrito en el anterior e-mail. El destino de Olivia está trazado de antemano y sus sentimientos son los que la hacen tomar una dramática decisión.



"HISTORIA DE DOS HERMANAS": Cuenta la historia de la madre y la tía de Olivia, Sarah y Brigitte. Son dos jóvenes de buena familia. Llegan a Dublín durante la década de 1810. La hermosa Sarah conoce a Sean, un joven sencillo y vividor, del que se enamora locamente, a pesar de que Sean no llega del todo a corresponderla. Por su parte, Brigitte, que no es tan hermosa como Sarah, se niega a depender económicamente de sus padres y comienza a trabajar como dama de compañía para lady Woods. El hijo de ésta, el tranquilo Joseph, se enamora de Brigitte nada más verla.

"MÍA STELLA": La tercera parte de la historia. Olivia ya está en Dublín viviendo con sus tíos. Pero no es feliz. Su prima Estelle intenta congeniar con ella sin éxito. Estelle es una adolescente con sus propias ideas acerca de la vida y de su papel en la sociedad. Cuando Olivia cae gravemente enferma, su hermanastro Frederick, hijo de una relación extraconyugal de su padre, va a Dublín para estar con ella. Entre Estelle y Frederick nace una apasionada historia de amor que les lleva a romper todas las reglas establecidas.
Tengo estas otras historias escritas:

"AMOR PROFANO": La joven Jane es enviada a un convento tras ser descubierta en una situación comprometida con el apuesto lord Black. A pesar de que llega a tomar los hábitos, Jane sigue esperando a que su amado vaya a buscarla, pero eso no pasa. La sobrina de Jane, Adorna, que acaba de debutar en sociedad, se queda huérfana. Decide irse a vivir al convento al convertirse Jane en su tutora. Adorna es una joven inocente, pero siente un infinito desprecio hacia la hipócrita sociedad en la que vive. Cuando lord Black es descubierto rondando el convento donde está Jane con la intención de raptarla, la Madre Superiora envía a Jane y a Adorna a un convento situado en España. Son los años de la Guerra de la Independencia contra los franceses. Un joven soldado francés, Pierra Chasseur, aparece malherido en el convento. Adorna cuida de él. Poco a poco, va naciendo entre ellos un sentimiento que va más allá de la amistad. Pero Jane ve con malos ojos este incipiente romance.

"A ORILLAS DEL MAR": Transcurre en plena época de la Regencia. Lucien, un joven tímido, se encapricha de la institutriz de su prima Rose, una chica vital y sencilla. Lucien decide seducir a la institutriz de su prima. Sin embargo, poco a poco, empieza a experimentar una serie de sentimientos hacia su prima que nunca antes había experimentado. O que no quería ver. Pronto, se encuentra con un rival inesperado. La propia institutriz de Rose, que vive atormentada por los sentimientos que su pupila despierta en ella.

"LA ROSA BLANCA": Otra historia que transcurre en la Regencia. Anthony, un joven de buena familia, va a casarse con la hermosa y muy deslenguada Katherine, a pesar de que no está enamorado de ella. Mientras Katherine empieza a experimentar los primeros síntomas de una grave enfermedad, Anthony empieza a sentirse atraído por la tranquila hermana de su prometida, la tranquila Edwina.

"PLEAMAR": Años 80. Una periodista investiga acerca la vida de una familia aristocrática que vivió en la isla de Tabarca en el siglo XIX mientras recuerda su pasado, durante la década de 1960. La historia de la familia comienza cuando acaba la Primera Guerra Carlista. Una familia adinerada familia española que ha estado viviendo en Londres durante la contienda española decide regresar a su Valencia natal al acabar la misma. Sara, la hija mediana de la familia, se niega porque no quiere abandonar al hombre del que está locamente enamorada, un peligroso delincuente de los bajos fondos. Finalmente la obligan a regresar. La hermana mayor de Sara, María, se promete en matrimonio con el conde de Moro. Pero María muere repentinamente y, a pesar de las protestas de Sara, sus padres la prometen en matrimonio con el conde y éstos se casan. Los dos pasan más tiempo viajando que en su casa y Sara es incapaz de olvidar a su priemr amor. El tiempo hace que la mujer vaya enloqueciendo poco a poco. De su unión con el conde, Sara da a luz a dos hijas, Cristina y Teresa. Teresa está condenada a repetir la historia de su madre cuando se enamora apasionadamente de un apuesto y misterioso hombre, pero éste ama a Cristina. Tras la muerte de sus padres y de Cristina, Teresa es obligada a regresar a España, donde conoce al marqués de Augusta, que ha estado viviendo de un modo disipado durante muchos años. Éste la corteja por motivos puramente convencionales y acaba pidiéndole a Teresa que se case con él. A pesar de que no lo ama, Teresa acepta y se instalan en la isla de Tabarca. Con él tiene tres hijos, dos hijas, la rebelde Liliana y la dócil María del Mar, y un hijo, Roberto. Al mismo tiempo, contratan a una familia, los Gelmírez, para que formen parte de la servidumbre. Los hijos de los Gelmírez y los hijos de los marqueses crecen juntos. A pesar de que Samuel, el hijo de los Gelmírez, tiene una novia formal, Aledis, una sencilla modistilla, entre él y María del Mar existe una gran amistad. Con el paso del tiempo, esa amistad llega a algo más y comienza entre ellos una relación prohibida y clandestina. María del Mar será la que, finalmente, tenga el valor necesario de romper con todo para ser feliz con el hombre al que ama.

"ADRIANA VILLAR" (Este título es sólo provisional): Año 1840. Adriana es una joven que vive en el pueblo de Albaida del Aljaralfe, cerca de Sevilla. Es una joven poco convencional para la época que se niega a seguir las normas establecidas. Un desengaño amoroso y un intento de asesinato que acaba con la vida de una persona importante para Adriana obligan al padre de ésta a enviarla a casa de sus tíos, Eduardo y Bernarda, en Huesca. A pesar de que es bien recibida sus tíos y los conocidos de éstos, Adriana siente que no encaja allí, Su vida cambia cuando encuentra al que será el verdadero amor de su vida, Gabriel.

"ISABEL": Cartagena, año 1867. Isabel es una chica de quince años, hija del marqués de Roche. Es rebelde y muy terca. Su madre, Elisa, protagonizó el escándalo de la década cuando, años antes, huyó con su amante, un poeta irlandés llamado Shawn, llevándose consigo a Isabel. Durante años, la niña ha vivido feliz en Nápoles en compañía de su madre y del amante de ésta, que la ha querido como a una hija. Pero cuando Shawn y Elisa mueren, Isabel se ve forzada a regresar a su Cartagena natal a vivir con un padre que nunca la ha querido y por el que ella no siente ningún cariño. La muchacha encuentra apoyo en sus dos mejores amigos, la hermosa Lily y el romántico Daniel. Don Jaime Trévelez, padre de Isabel, es un sinvergüenza que dilapida la fortuna familiar. Catalina Márquez, la institutriz de Isabel, es una mujer ambiciosa que no duda a la hora de seducir a Jaime para casarse con él y convertirse en la nueva marquesa de Roche. Pero la felicidad dura poco después de que Catalina, tras un difícil embarazo y un durísimo parto, caiga enferma. El ambiente es cada vez más oscuro en la casa de los Trévelez e Isabel busca refugio en sus amigos, especialmente en Daniel. La adolescencia hace que los sentimientos entre ambos vayan tornando un cariz que no es sólo fraternal. Ya no serán nunca más dos buenos amigos.

Y ya por último, decirles que publicó en Lulu.com dos novelas:

1. "Instintos animales". Es una historia que transcurre en las islas del Canal de La Mancha durante la década de 1830. Cuenta la historia de amor entre Catherine, hija de una aristocrática familia, y Gerald, su hermano adoptivo, en un ambiente de clandestinidad.

Instintos animales
 
Saint Helier, isla de Jersey, en el Canal de La Mancha, 1838. Durante años, la relación entre Catherine Mercier, hija de los marqueses de Asgard, y su hermano adoptivo Gerard siempre ha sobrepasado los límites de lo fraternal. Con el paso de los años, el cariño existente entre años se ha intensificado. Ya no son sólo hermanos. Gerard quiere mucho más de Catherine. Y ella, a pesar de sus esfuerzos, no podrá resistirse a él. 
 

2. "Amor clandestino", Trata sobre la historia de amor de dos primos en la España de principios del siglo XX.


Amor clandestino
 
Durante la Primera Guerra Mundial, España mantiene una posición de neutralidad mientras combate con sus propios demonios. En este contexto transcurre esta historia. Parthenia Veloso es una adolescente de apariencia angelical y belleza fría que vive con sus padres en un pequeño pueblo. Miguel Veloso, el primo de Parthenia, es un muchacho de apariencia siniestra. Cuando Miguel, su madre y su hermana Rebeca se van a vivir a casa de sus tíos, entre Miguel y Parthenia comienza a surgir una fuerte atracción que se ve reforzada cuando se percatan de que ambos sienten la misma fascinación por la muerte. Los dos viven una historia de amor secreto, pasional y, al mismo tiempo, casi macabro. 
 

Avisarles que de momento sólo está publicando la historia "Con El Corazón Roto", ya que las otras están en proceso de revisión. Cuando las tengas listas, las publicará.

¡NUEVO RETO EN EL CLUB!, ¿TE ANIMAS A PARTICIPAR? (Re-editado)

Hola holita hola!, ¿que tal llevamos el comienzo del fin de semana?, espero que muuuuuy bien, jejeje. Pues yo, una vez más, os traigo un nuevo reto al que he titulado "Reto, Las Dos Caras De Un Mismo Cuento". Y os preguntaréis... ¿en qué consiste?, pues es muy sencillo. Presten atención!:

*Trata de escribrir un pequeño relato enfocado desde el punto de vista de uno de los personajes principales. Da igual de lo que trate o del género que sea, pero si es para mayores de 18 años, habrá que advertirlo. La extensión no debe de exceder de las 5 páginas y dicha historia tendrá su comiezo y su final. Osea, hay que presentarla acabada jejeje.

*Luego, otra socia que se preste a participar, tendrá que adaptar esa misma historia desde el punto de vista del otro personaje principal. Así que, obviamente, se necesitan dos personajes principales (da igual si son del mismo sexo o no). Deberá respetar las conversaciones, pero podrá cambiar lo que piensan cada uno de los personajes y todo eso. Espero haberme explicado bien, jejeje.

Para que se hagan una idea de a lo que me refiero, visiten esta entrada:

http://elclubdelasescritoras.blogspot.com/2011/11/oscura-rendicion-dc-lopez.html

O vean este ejemplo:

¡Jezabel!. Por el amor de Dios... —protestó, afirmando con más fuerza la sujeción de sus dedos sobre la mandíbula de la mujer, hasta el punto de que sus nudillos se pusieron blancos.

Castiel... —murmuró ella con voz áspera, mientras unas pocas lágrimas caían esta vez sin control alguno por su perfecto rostro sonrojado. Oírla pronunciar su nombre con aquellos labios tensos y sonrosados le provocó un torrente de deseo. El ángel no pudo evitar mirarla fascinado, con brillo en sus ojos, creyendo que por fin lo había conseguido. Se dio cuenta de su equivocación cuando ella dejó de llorar y le sonrió—. No debes pronunciar el nombre de Dios en vano —se burló la diablesa ante sus narices.

***

- ¡Jezabel! Por el amor de Dios... - protestó Castiel apretando los dedos en su mandíbula. Jezabel derramó unas lágrimas sin poder contener la emoción. No le importaba que Castiel se enfadara más, al menos pasaría tiempo junto a él. Los años en el Infierno habían sido duros habiendo dejado atrás una parte de su corazón.

- Castiel... - murmuró ella con la voz ronca de tanto haber gritado. Un destello brilló en los ojos del hombre, y ella sonrió con insolencia. - No debes pronunciar el nombre de Dios en vano - se burló.
 


Nota: Este extracto y el enlace que he puesto, trata de un relato que escribimos Paty C. Marín y yo para un concurso.

*En total necesito 14 voluntarias, 7 para que hagan el relato y otras 7 para que lo modifiquen adaptándola desde el enfoque del otro personaje principal.

Nota: Estas cifras pueden ser modificadas, depende de la aceptación que tenga este proyecto. ¡Atención!, las cifran han sido modificadas.

Nota 2: Ya se han apuntado 13 socias (Astarielle, Paty C. Marín, Déborh F. Muñoz, MariJose, Luz, Memetin, Natalia, Melii~, Mari, PukitChan, Nina Neko, Ariusk y Mircea~) , así que, aún falta 1 más.

Entonces... ¿Quieres ser tú una de ellas?, si es así, deja un comentario aquí mismo con tu ofrecimiento. Pero ¡ojo!, si crees que por alguna razón lo mismo no vas a poder cumplir, mejor no te apuntes, ¿vale?. No es por nada, pero ya me pasó en el reto Diferentes Versiones De Un Mismo Cuento, que se apuntaron muchas y unas pocas se echaron atrás a última hora y  nos dejaron colgadas O.o

En fin, eso es todo. Si alguién tiene alguna duda o quiere consultar algo, es libre de preguntarme.

¡Saludos queridas socias y feliz fin de semana!, muak!

viernes, 27 de enero de 2012

QUINTO FINAL ALTERNATIVO PARA LA HISTORIA "HILO ROJO DEL DESTINO" BY HADA FITIPALDI

Hola a tod@s!, aquí les traigo el 5º final alternativo que se ha presentado para que, en el caso de ser el elegido, pase a formar parte de esta gran historia tejida entre tantas fantásticas socias... Si tú también quieres presentar uno, aún estás a tiempo, pues hasta el Domingo 29 de Febrero no cerraré el plazo de entrega... ¿A qué esperas para intentarlo y poner tu granito de arena?. El lunes 30 comenzarán las votaciones... Quien sabe, lo mismo tú final acaba siendo el elegido... ¡Anímate!

Bueno, no me enrrollo más, así que, aquí os dejo el final de Hada Fitipaldi, pero antes, os dejo el enlace de la historia completa y el último párrafo hilado al mismo:
 



Párrafo anterior escrito por Gisela:

"—¡Mamá, no!

Corrí hacia el almacén, pero nada me preparó para ver lo que se desarrollaba ahí adentro. Roberto estaba parado, paralizado en el medio de la estancia, horrorizado, a unos metros una mujer alta y esbelta, se apuntaba a ella misma con un arma en la cabeza.

—No puedo permitir que me encierren otra vez, lo prefiero así —dijo.

—¡No! —tres gritos sonaron a la vez, pero fueron amortiguados por la detonación del arma."



Cerré los ojos con el horror invadiendo cada poro de mi piel, al tiempo que la detonación estallaba en mis oídos como una bomba. No estaba preparada para ver a la madre de Roberto en el suelo, bañada en un charco de sangre. No quería ver morir a más personas. Pero los abrí rápidamente cuando un grito desgarrado de dolor surcó la noche.

-¡Que nadie se mueva! -bramó una potente voz, que me sonó familiar al instante.

El panorama que se mostraba ante mí era sorprendente. Varios agentes de la policía uniformados con chalecos antibalas y pistolas, salían de distintos puntos, rodeando a Roberto y a su madre. Aún estando en estado de shock, dejé que Iris me empujara hasta el nutrido círculo de agentes de la ley. En el centro del mismo, la madre de Roberto se encontraba arrodillada en el suelo, con una mano fuertemente cerrada sobre la muñeca del brazo que anteriormente sostenía el arma. En un atisbo de lucidez comprendí que le habían disparado en la mano para evitar que se suicidara. Un alivio profundo invadió mi ser, ya que Roberto no se merecía ver morir a su madre ante sus ojos. Ya era suficiente la muerte de un progenitor, la muerte de su madre lo hubiera marcado de por vida.

-Rafaella Benedetti, queda usted detenida por el asesinato de Vincent -explicó con contundencia el detective Bennet, mientras se dirigía hacia la madre de Roberto-. Cualquier cosa que diga a partir de ahora puede ser utilizada en su contra…

El inspector siguió recitando toda la normativa legal, en medio del revuelo de policías que iban de un lado a otro. Le hizo un gesto a un compañero para que se llevara a la detenida al coche, y después clavó sus penetrantes ojos en mí, que me había ido acercando a Roberto poco a poco, hasta posar mi brazo sobre su hombro. Bennet nos miró alternativamente en su ya conocida expresión indescifrable. Sin lugar a dudas, no habría hombre que pudiera perturbarme más que él, haciéndome sentir una hormiguita.

-Tendréis que acompañarme a comisaría para explicarme lo que ha pasado -su mirada se dirigió a Roberto, y pude distinguir en la misma un leve destello de compasión, que se extinguió rápidamente. Quizás hasta el más implacable de los detectives tendría corazón-. Siento la muerte de su padre y todo lo demás, Di Steffano. Queda usted libre de cargos, aunque tendrán que prestar declaración.

Lo observé alejarse en la oscuridad de la noche, y en cuanto su coche desapareció, todo mi cuerpo descargó la tensión que sentía. Volví el rostro hacia Roberto, que miraba ensimismado el pequeño charco de sangre formado en el suelo, allí donde habían disparado a su madre. Su mirada estaba perdida, y cuando le cogí la cara con ambas manos obligándolo a mirarme, vi una tristeza tan profunda en sus ojos que me sobrecogí de pies a cabeza. Así que hice lo único que se me ocurrió, cuando sabes que las palabras apenas van a ser escuchadas, abrazarle con todas mis fuerzas, dejando que descargara su peso en mí, y esperaba que también todo el sufrimiento que había estado conteniendo hasta el momento.


3 meses después…


Nuestros pasos resonaban con fuerza en la galería de la penitenciaria. El largo pasillo de pavimento gris nos llevaba de la sala de visitas a la ansiada salida. Comprendía la frustración que tendría que sufrir Rafaella, la madre de Roberto, encerrada entre aquellos muros. Pero cada vez que íbamos a verla mostraba la misma sonrisa exultante cuando veía a su hijo, por fin recuperado después de tantos años. La habían condenado por el asesinato de Vincent, aunque al haber sido en defensa propia, la condena había quedado reducida. Saldría dentro de unos pocos años, y al menos sabía que había recuperado a su hijo, y Roberto a su madre. Recordaba bien sus palabras tras el suceso en el almacén:

“Espero que puedas perdonarme alguna vez, hijo. No podía perder a la persona más importante de mi vida, y lo haría de nuevo si tú vida dependiera de ello. Solo siento que de esta forma, te haya quitado aún más años de estar junto a mí. Te quiero, Roberto. Siempre lo haré”

Y Roberto, con ese lado tan cariñoso que lo caracterizaba, no había dudado en apoyar a su madre en todo momento. Además, estaba en prisión por haberle salvado la vida. De manera que íbamos a verla cada semana. Necesitaba a su madre, fuera en la condición que fuera.

Dejamos que el viento de la tarde se llevara el regusto amargo que siempre nos quedaba tras la despedida, mientras con la moto surcábamos la distancia que nos separaba de casa de Carla. Cuando llegamos a la misma, desmontamos y tomados con firmeza de la mano, llamamos a la puerta, que se abrió mostrando tras ella a una Carla sonriente con un bebé bastante grande colgando de su brazo.

-Me alegro de veros de nuevo por aquí, chicos -dando un paso hacia mí, me dio un beso en la mejilla mientras Roberto tomaba al pequeño Víctor en brazos y lo alzaba por los aires-. Cuidado Rob, acaba de comer.

Desde hacía un par de meses, Roberto había retomado el contacto con Carla, porque a pesar de todo Víctor era su hermano, y no tenía que sufrir por todos aquellos que a su alrededor habían obrado mal. Roberto quería que lo tomara en cuenta como alguien de la familia, aunque sabía que Carla no era feliz en aquel lugar, que le traía tantos malos recuerdos, y le recordaba a cada instante a un hermano que ya no volvería. Por eso había decidido ayudarla. Necesitaba que fuera feliz, y así el pequeño Víctor también lo sería.

-Estaremos solo un momento, Carla, he venido a traerte algo.

Sacó de su bolsillo un sobre y se lo tendió a la chica, que le miró sorprendida.

-¿Qué es?

-Ábrelo y compruébalo tú misma -indicó distraído Roberto, mientras Víctor le cogía la nariz con sus pequeñas manitas.

Carla sacó una llave junto con unos papeles y un fajo de billetes, y se los quedó mirando estupefacta, mientras los leía por encima. A cada línea que avanzaba, sus ojos se iban abriendo como platos.

-¿Una casa en Italia? ¿A nombre de Víctor? -Carla nos miró estupefacta- ¿Qué significa esto?

-Verás, esa casa es de mi madre, me la ha donado, y yo se la quiero dejar a mi hermano -Roberto se acercó a Carla, mirándolo con cariño y determinación-. Sé que podría haberlo hecho mejor contigo, y que aquí no eres feliz, y quiero hacer algo por este niño.

-No sé qué decir -los ojos de Carla empezaron a brillar, amenazando con derramar las lágrimas que contenían-. No lo puedo aceptar…

-Claro que puedes -animé cogiendo sus manos entre las mías-. Te mereces empezar de nuevo.

-Eso sí -aclaró Roberto con una sonrisa divertida, mientras le pasaba el niño a su madre-, ya sabes que nos tienes que guardar una habitación para que vayamos a visitarte.

Y con una expresión de gratitud en su rostro, y una incipiente sonrisa llena de esperanza, la dejamos mientras salíamos de la casa, para coger de nuevo la moto.

Roberto condujo con la agilidad que le caracterizaba por distintas carreteras, desviándose del camino hacia nuestras respectivas casas. Sorprendida, observé como detenía la moto ante una pequeña cabaña anclada en la orilla de una cala muy poco transitada. La oscuridad poco a poco se iba tragando la luz que quedaba, dejando apenas un resquicio anaranjado en el cielo del atardecer. Roberto me tomó de la mano, y se dirigió hacia la casita de madera. Para mi asombro, sacó una llave del bolsillo y abrió la cerradura de la puerta, haciéndome pasar.

-Pero, ¿qué es esto? -pregunté mirando a mi alrededor.

La casa por dentro era muy acogedora y preciosa. La parte central estaba ocupada por dos cómodos sofás, con una televisión plana en el centro de los mismos. A la izquierda se extendía una cocina, tan solo separada del salón por una barra alta, rodeada de un par de taburetes de madera. Al fondo la puerta estaba abierta, y pude distinguir una especie de terraza cerrada con unas amplias puertas de cristal, tras las que se veía la agitación del oscuro mar. Roberto me dirigió hacia allí, y cuando entré en la habitación, una fragancia dulce y exótica llenó mis fosas nasales. En una mesa a la izquierda, había varias velas de colores encendidas, que daban una luz cálida a la estancia. Y a la derecha un amplio colchón se escondía tras amplios paños de seda muy fina de colores. Parecía un lugar de cuento. Roberto me atrajo hacia él, posando una mano sobre mi cintura, y otra acariciando mi mejilla, y colocándome un mechón del rizado cabello que caía suelto a mi alrededor.

-Éste, preciosa, va a ser nuestro refugio particular. Solo tuyo y mío -acercó su cuerpo aún más al mío, separándonos solo una molesta capa de ropa-. La he comprado con un poco de dinero de la herencia de mi padre, y quiero besarte en cada rinconcito de este lugar, que cada partícula de la cabaña sea testigo de lo que te quiero.

-O sea, que me quieres -susurré con tono pícaro; su respiración tan cerca de la mía, provocaba un cosquilleo nervioso y excitante, que se expandió por cada poro de mi piel.

-No creo que lo hayas entendido bien, nena -me empujó hacia la cama, haciéndome caer sobre la mullida superficie, quedando atrapada entre el colchón y su cuerpo-. A lo mejor te lo tengo que explicar mejor -su boca descendió hasta mi oído derecho, provocándome un escalofrío que me atravesó por completo-. Te quiero con cada centímetro de mi ser, y voy a besarte tantas veces y durante tanto tiempo -siguió descendiendo con sus ardientes labios por mi mandíbula, hasta llegar al cuello, dejando un reguero de besos que continuó un camino ascendente hasta mi boca, quedando suspendidos sus labios a muy pocos milímetros de los míos-, que me pedirás a gritos que no pare jamás.

-Suena prometedor, nene… -suspiré aspirando el aroma cálido de su aliento-. Entonces, ¿a qué esperas?

Sin darme apenas tiempo a respirar, su boca captó la mía en un beso tan apasionado y exigente, que me llevó hasta las profundidades del abismo, para después despegar hacia el cielo más dulce que pudiera desear. 



FIN

jueves, 26 de enero de 2012

CUARTO FINAL ALTERNATIVO DE LA HISTORIA "HILO ROJO DEL DESTINO" BY NINA NEKO

Hola a tod@s!, aquí os dejo el 4º final alternativo que he recibido para que, en el caso de ser el elegido, pase a ser hilado a la historia "Hilo Rojo Del Destino":

Pero antes, os dejo el enlace de la historia al completo:
 





Párrafo anterior escrito por Gisela:

"—¡Mamá, no!

Corrí hacia el almacén, pero nada me preparó para ver lo que se desarrollaba ahí adentro. Roberto estaba parado, paralizado en el medio de la estancia, horrorizado, a unos metros una mujer alta y esbelta, se apuntaba a ella misma con un arma en la cabeza.

—No puedo permitir que me encierren otra vez, lo prefiero así —dijo.

—¡No! —tres gritos sonaron a la vez, pero fueron amortiguados por la detonación del arma."

Final Alternativo

Por: 
Nina Neko


2 Días Después


—Y así se completa una vez más el ciclo de la vida. Mientras que aquellos que aún nos encontramos en el camino hacia Dios despedimos a nuestros hermanos, ofreciéndoles la bendición. Y tal como  dijo el hijo de nuestro creador; “Perdónalos Padre, pues no saben lo que hacen” yo les pido a ustedes que perdonen a nuestra querida hermana, esta pobre mujer equivocada que no sabía lo que hacía. No la culpemos y digámosle fraternalmente “Adiós”

El sacerdote había terminado de hablar justo cuando el último cúmulo de tierra oscura cubría el féretro. La cruz fue colocada ceremoniosamente junto al único arreglo de flores, ante los presentes que parecían no poder guardar silencio, pese a las circunstancias.

La noticia de que ella había sido la asesina de Vincent conmocionó al pueblo entero, provocando un resentimiento y una sensación de confusión que les obligó a sepultarla en el área designada para los “indeseados” junto al propio Vincent, pues gracias a nuestro testimonio habían podido conseguir las cintas que probaban que mi antiguo profesor había sido el asesino de Lorenzo.

Caminé lejos de la sepultura, ya que era incapaz de soportar aquellas palabras.

Adiós

Muerte

Adiós…

Roberto no había querido asistir al funeral, como era lógico, además nunca había tenido mucho trato con ella, nunca lo había intentado y, pese a que por dentro le hubiera gustado acompañarme en aquellos instantes, él tenía muchas otras cosas que hacer, como acomodar su desordenada existencia.

Así que decidió hacer un viaje a Italia para conocer el hospital psiquiátrico en el que estuvo aprisionada su madre durante tanto tiempo, supongo que necesitaba conocer el lugar en el que ella había sufrido tanto lejos de su único hijo, y todo debido al hombre que había creído amar tan locamente. Quizás eso lo ayudaría a comprender y aceptar con fortaleza todo el dolor que padeció lejos de su madre y en manos de un padre cruel, desinteresado y frío como la muerte.

A mi alrededor el cuchicheo no se hizo esperar, ni siquiera en esos momentos.

“Era evidente su enamoramiento de colegiala”  “Todo el mundo sabía lo de Vincent pero ¿Lorenzo?…” “Se lo merecía…” “Pobrecita”

El detective Benet se acercó a mí cuando el funeral se dio por finalizado, los pocos presentes se dispersaron con paso furtivo, dubitativo y desganado. Parecía como que todos se encontraban en shock, y la verdad es que no era para menos.

—Señorita Iduarte —dijo el detective, di media vuelta, cansada.

—¿Qué sucede detective, acaso me interrogará una vez más? —le pregunté, harta de toda esa situación y atrozmente herida.

—Desde luego que no, todo se ha esclarecido ¿no es así? Usted y su novio me lo confirmaron todo y la escena del suicidio es la mayor prueba.

—Bien, entonces déjeme tranquila

—Pero aún así —continuó él, mirándome con esos ojos letales y sumamente astutos—. Hay cosas que no embonan, los crímenes pasionales abundan hoy en día pero este no parece serlo, al menos no como quieren hacernos creer a todos

—Bueno detective, las apariencias engañan, en todo caso, si aún tiene dudas salga allá afuera y haga su trabajo, averígüelo, pero por favor déjeme tranquila ¿quiere? ¿no se da cuenta de que esto es muy doloroso para mí?

El detective Benet iba a espetar algo más pero yo se lo impedí, lanzándome a la vereda, corriendo velozmente, tratando de escapar de todos los oscuros y dolorosos secretos, de todas las interrogantes, de todos mis pecados.

Detrás de mí escuché a Dylan y a mi madre gritándome, pero no me detuve, quería estar sola y pensar.

Llegué hasta la casa y subí a mi alcoba, ahí me dejé caer sobre la cama, llorando, sumergiendo mi rostro entre la almohada para que mitigara los gritos que necesitaba liberar.

Mi vida estaba destrozada, después de todo lo que había sucedido, de los obstáculos tan grandes que había tenido que sortear por el chico al que creía amar, después de la muerte de…

Todo era inútil, todo había sido un intento desesperado por permanecer junto a él, pero estaba equivocada, desde el principio.

Roberto no era para mi, supongo que me ilusioné de más, supuse que al fin había encontrado a alguien verdadero, al amor verdadero.

Probablemente me hubiese quedado así, en un grito hasta el amanecer si no hubiera escuchado el crujido en mi ventana. Me levanté de un salto y, ahí estaba él, esos ojos, ese porte de niño malo.

—¿Roberto? —fue lo único que pude decir cuando abrí la ventana, Roberto entró sin mucho esfuerzo— ¿Qué estás haciendo aquí? Creí que ya estarías en camino a Italia.

—No pude irme Caroline, no quiero irme, al menos no sin ti.

—¿Sin mí? —estaba perpleja

—Sé que es una locura, que somos muy jóvenes pero… No te asustes por favor, lo digo en serio —Roberto tenía sus manos en mi rostro y me miraba solícitamente, sus ojos estaban inyectados de dulzura

—Es imposible Roberto ¿Adonde iríamos?

—A donde tú quisieras, a Italia a Francia, tus deseos serán órdenes para mí, podremos viajar toda la vida, recorrer el mundo entero y, si tu lo quieres, morir en una luna de miel eterna. Solo quiero estar contigo, por favor permíteme permanecer a tu lado cada minuto de mi vida…

Lo pensé un momento ¿Irme con él? ¿Dejar a mi madre y a mi hermano? ¿Olvidarme de mi vida aquí?

Era demasiado, el dolor que sentía estaba demasiado fresco, mi vida aún no se detenía del todo y me sentía desorbitada.

Entonces lo comprendí todo, fue como un flash de luz frente  a mis ojos.


***

Era medianoche, atravesábamos un tramo de pastizales recién cortados, la luna fija en lo alto del cielo era nuestra única luz.

Roberto me tenía tomada de la mano tan fuertemente, como si no quisiera que me alejara un solo instante y eso me hacía sentir inmensamente segura.

—Ahí está —dijo por fin entre el barullo de la noche.

Agucé la vista, a unos metros de distancia podía percibirse una silueta que estaba de espaldas. Portaba un abrigo blanco y miraba las estrellas  serenamente. Como si no tuviera temor alguno de la noche y de sus inmensos peligros.

Roberto y yo nos acercamos, un par de ojos verdes nos recibieron amigablemente y para ser sinceros, me exalté al verlos nuevamente, eran tan parecidos a los de Roberto pero al mismo tiempo tan distintos, estos ojos parecían fríos capaces de cosas inimaginables y hasta cierto punto, sumamente crueles.

—Me alegro de que hayas podido convencerla cariño —dijo esa mujer inmensamente hermosa colocándose un cigarrillo entre los labios.

—Yo me alegro más, mamá

La abrazó con ternura y ella lo estrechó como quien estrecha algo preciado, algo valioso. Después me miró, con una media sonrisa dibujada en su rostro.

—Cuida mucho de él, cuídalo por las dos ¿de acuerdo? —asentí tímidamente, ella amplificó esa sonrisa—. Sé que lo harás  por que eres una buena chica, y veo en tus ojos el amor que sientes por él… Pero bueno ¿A que esperan? ¿Creen que conseguí todo esto por nada? Mejor que se marchen antes del amanecer.

Me abrazó con fuerzas y pude sentir ese cariño materno que sin duda alguna se desbordaba en cada poro de su ser.

Caminamos sólo unos minutos antes de encontrarnos en la carretera que salía del pueblo. Me sorprendí al verme parada frente a un convertible negro. Roberto agradeció a su madre y recibió las llaves del auto, enseguida metió las maletas que habíamos preparado para el viaje.

—Caroline —me llamó la mujer de cabellos dorados—. Quiero que tengas esto —me dijo, al tiempo que me extendía un exquisito camafeo de oro en forma de corazón, al abrirlo me encontré con la foto de un bebé de ojos verdes, sonriente.

—¿Es…?

—Así es —interrumpió ella—, ese niño es Roberto, es la única foto que pude tener de él. Notarás que aún falta una foto más por colocar, por favor, cuando la tengas, coloca la foto de su primer hijo

Roberto y yo nos sonrojamos

—No digas más madre o vas a asustarla —sonrió Roberto—, aunque... si ya te urge tener un nieto, por mi no hay problema, con mucho gusto me aplico en dártelo

—¡Roberto! —exclamé, aún más sonrojada

—Cuídense mucho chicos, y una vez más, gracias por no delatarme. No saben cuanto lamento la mentira que tuvieron que decir. Esa chica, Iris, parecía una buena muchacha, decir que fue la pareja de Lorenzo y de Vincent para crear ese triángulo amoroso es…

—Descuide, ella ya no se encuentra con nosotros, ya no había nada que hacer. Yo la quería mucho, era mi mejor amiga, por eso estoy segura de que donde quiera que esté, comprende bien por qué lo hicimos —dije, haciendo esfuerzos sobrehumanos por no romper en llanto como una desquiciada.

La madre de Roberto asintió, entristecida.

Roberto me tomó entre sus brazos.

—¿Estás segura de que no quieres venir? Ambos estaríamos felices con tu presencia —dijo, mirándome, yo asentí

—No hijo mío, yo estaré bien. Creo que iré a encontrarme con viejos fantasmas para deshacerme de ellos. No te preocupes por mí, sé defenderme sola…

Y me constaba que así era.

Roberto y yo entramos al auto después de abrazarla una vez más. Cuando partimos, no pude dejar de mirar por la ventanilla a la forma femenina que se perdía en la distancia, y que rompía con aquel escenario turbio y lúgubre de la noche.

Realmente era una mujer sin igual, fuerte y temeraria, capaz de hacer cualquier cosa por el bienestar de su criatura.

Estoy segura de que siempre la tendré muy dentro de mi corazón, como una segunda madre.

Ni siquiera me detuve a pensar en la primera, ni en Dylan. Había escrito dos cartas muy largas explicando mi huída, mi escape a la libertad y al amor. Así que no me preocuparía por el remordimiento si no hasta llegar a nuestro destino, al encontrarme con algún teléfono, entonces me mantendría en contacto con ellos, pero hasta entonces...

Ahora solo deseaba disfrutar. Degustar del golpe helado del viento al chocar contra mi cara, engullir aquella bocanada de libertad y sentirla ensanchando mis entrañas, obsequiándome todo el impulso y el arrojo que nunca tuve.

Roberto lo hacía, era capaz de lograr que todo se hiciera cada vez más pequeño, cada vez más bello.

En esos momentos, solo queríamos disfrutarnos uno al otro, su mano sobre la mía, sus ojos fuertes que se encontraban con los míos de vez en cuando. Nuestro amor tan intenso que había soportado todos los obstáculos, incluso los más tenebrosos.

Estábamos ahí, sin inquietudes. Seguros de nuestra decisión.

Tan solo preocupados por la ruta.

¿O quizás no?...


FIN





Nota: Si tú también quieres hacerle un final a esta gran e inédita historia, decirte que aún estás a tiempo, pues el plazo de entrega del mismo no finaliza hasta el Domingo 29 de Febrero. Así que... ¿A qué esperas para participar en este reto, tejiendo un cuento?. 

¡Saludos!

De Regreso...

Así es, como ven, estoy de vuelta. Aunque aún no he llegado a solucionar todos los problemillas que tengo, he decidido regresar por que el mundo blogger y vosotras, queridas socias, me hacéis mucho bien.

Manteniéndome alejada no solo no consigo solucionar las cosas, sino que además me siento como vacía... Por eso, aquí estoy de nuevo, sintiendo vuestro cariño y vuestro apoyo. ¿Que haría yo sin vosotras chicas?. Tengo mucho que agradeceros, pues vuestras palabras de ánimo y apoyo me han ayudado mucho en estos pocos, pero duros días... ¡Gracias!.

Sé que no he estado mucho tiempo ausente, pero aún así os he echado mucho de menos. Las que me conocen muy bien saben que el club es parte vital de mi vida y que sin el mismo no soy nadie... >-<  Pero eso ya quedó atrás, solo espero no volver a pasar por este bajón emocional y que me tenga que ver de nuevo obligada a dejaros... ojalá así sea y esto no se repita!.

En fin, que estoy de vuelta y con ganas de celebrar los logros del club!!!, Sip, así es, pues el club ha alcanzado esta alarmante cantidad de seguidores:




¡Y eso no es todo!, pues además de haber alcanzado esta friolera cifra de seguidores, también hemos conseguido otros grandes logros, míren!:

*Visitas: 102250

*Comentarios: 4059 (sin contar los spam, ni los eliminados o privados)

*Entradas publicadas en estos 11 meses: 771 (incluyendo ésta, jejeje)

*160 socias (más dos que tengo en lista de espera, en breve os presentaré a la socia nº 161 O.o)

Maravilloso, ¿verdad?. Espero que este ritmo continue así en el futuro y que pronto seamos muchas más.

¡Y eso es todo de momento!. Lo dicho, gracias por todo gente y hasta otra!, Saludos y bs!

lunes, 23 de enero de 2012

Blog Cerrado Temporalmente

Lamento informaros de que debido a problemas personales, me veo obligada a dejar el blog de lado.

Espero poder estar de vuelta con más ánimos pronto y que tod@s vosotr@s sigan ahí, a la espera y que no olviden este blog que con tanto cariño he creado para tod@s vosotr@s.

También espero que mis queridas socias me entiendan y no se sientan estafadas por que el club haya tenido que ser cerrado... Decirles que espero que sea de forma temporal... Igualmente, si Anna quiere, ella tomará el control del mismo y así, el blog podrá continuar activo aunque no sea con la misma frecuencia.

A Anna Soler y unas cuantas escritoras-bloggeras más, les pido disculpas por mi ausencia, pues al final no he podido crearles las fichas de socias... Espero poder hacerlas pronto, si para entonces aún continuan queriendo pertenecer al club y yo me encuentro con ánimos...

Y también aprovecho la ocasión para pedirles disculpas a las socias que están participando en los retos que tengo entre manos, pues les estoy dejando colgadas. A ver si se pasa pronto este bache personal y retomamos estos proyectos en breve. Ojalá sea así y pueda seguir contando con vuestro apoyo!

Hasta otra querid@s, os echaré de menos. Saludos!

domingo, 22 de enero de 2012

TERCER FINAL ALTERNATIVO PARA LA HISTORIA "HILO ROJO DEL DESTINO" BY PUKITCHAN

Hola a tod@s!, aquí os traigo el tercer final alternativo que he recibido para que, si acaba siendo elegido en las votaciones, pase a ser hilado a la historia que hemos estado tejiendo en el reto: Tejiendo Un Cuento:

La historia completa está aquí:
 



Párrafo anterior de Gisela:

—¡Mamá, no!

Corrí hacia el almacén, pero nada me preparó para ver lo que se desarrollaba ahí adentro. Roberto estaba parado, paralizado en el medio de la estancia, horrorizado, a unos metros una mujer alta y esbelta, se apuntaba a ella misma con un arma en la cabeza.

—No puedo permitir que me encierren otra vez, lo prefiero así —dijo.

—¡No! —tres gritos sonaron a la vez, pero fueron amortiguados por la detonación del arma.

Final Alternativo

Por: 

PukitChan


En el momento en el que cerré mis ojos, sólo escuché el sonido de la bala dando de lleno con algo qué no pude precisar qué era. Mis oídos estaban aturdidos por que el sonido del disparo fue demasiado cerca de mí. Las manos me temblaban fuertemente y el agitado palpitar de mi corazón me hizo abrir la boca para tomar una gran bocanada de aire.

Había actuado por impulso: corrí rápidamente hacia la madre de Roberto, ya que éste estaba paralizado. Cuando la detonación se dio, empujé la mano de la mujer para que la bala se desviara hacia el techo. Aunque mi vida había estado en peligro, supe que era algo que tenía que hacer; Roberto no estaba en condiciones para perder también a su madre.

Escuché unos sollozos agudos y desgarrados, para luego percibir cómo una gota tibia se deslizaba por mi mejilla. Alcé la mirada, notando que ella estaba llorando, sin cubrirse, sin reprimirse. El arma cayó al suelo, en un ruido que no pareció hacer efecto en nadie, luego de todo lo que había ocurrido.

―Tú… ―musitó entrecortada―, ¿por qué me detienes…?

Antes de que tuviera tiempo de responder, o siquiera analizar debidamente mi comportamiento, escuché a la lejanía el ruido de una sirena de la policía. Luego, la voz de Iris a lo lejos, hablando con alguien, aunque dudaba seriamente de que ese alguien fuese Roberto.

―¡Caroline, mamá! ―escuché mi nombre en la voz rota de Roberto, aunque pronto también mis ojos se encontraron con sus brazos rodeándome, o más bien, rodeándonos. Él no sólo me abrazaba a mí, también sostenía con fuerza a su madre.

Los movimientos del pecho de él me confirmaron que también estaba llorando pese a que no podía ver de manera clara su rostro. Cuando exhalé un gemido roto, comprendí que yo también lo hacía. Mordí mis labios cuando me di cuenta que tan cerca estuve de la muerte y al mismo tiempo, lo cerca que estuve de verlo a él completamente destruido.

No me di cuenta del momento en el que el ruido de las patrullas había cesado, sólo me incorporé cuando escuché algunas pisadas, voces, ruidos y finalmente una voz amenazante, fuerte, que en estos tiempos había aprendido a reconocer en una sola persona.

―Di Sttefano… ―exclamó ronco, pero sin llegar a gritar del todo el detective Anthony Bennet―, por favor, le pido que por el momento se aleje de ella, porque...    

―¡Es mi madre! ―gritó él, abrazándola protectoramente―. ¡No me pida que me aleje de ella!

―Roberto… ―susurré tratando de calmarlo. Aunque, ¿qué se supone qué debía hacer él? Estaba entre la espada y la pared. No había algún buen lado en el cuál ponerse.

De soslayó, miré a Iris hablando con uno de los oficiales que acompañaban al detective. Se abrazaba a sí misma y tenía la cara llena de lágrimas secas. Asintió un par de veces a las, seguramente, preguntas del oficial y después de unos minutos el mismo oficial se acercó a Bennet para susurrarle cosas.

―De acuerdo, Di Sttefano ―dijo el detective―, no haremos nada pero necesito que nos acompañes… mejor dicho, que todos vosotros nos acompañen a la comisaria. Se hablará ahí de esto ―dictaminó sin dar pie a reclamos. La madre de Roberto parecía ajena a todo, claramente sintiéndose bien y calmada en los brazos de su hijo. Opté por acércame a Iris para abrazarla también. No sabía qué había dicho para intervenir, pero le agradecía todo pese a que comprendía que le dolía lo del profesor Vincent.

Durante el camino en el automóvil de Iris, con dos patrullas delante y una atrás, en la cuál venían Roberto y su madre, todo permanecía en silencio. Era muy de noche y apenas alcanzaba a ver algo más allá del vidrio. Gracias al reflejo, mis ojos observaron las manos de Iris apretando con fuerza el volante.

―Yo… tenía una relación con Vincent… ―confesó. Me giré lentamente para verla, preguntándome si acaso había más que descubrir esta noche―. No conocía en absoluto sus planes de matar a Roberto y a su padre. Acepto que sabía su odio hacia ellos por lo de Carla, pero… ―Negó con la cabeza―. Juro que no te lo ocultaba Caroline, todo este tiempo, yo sólo creí que era mejor dejarlo en silencio… pensé que tú lo sabrías todo, pero no de esta manera. Cuando Carla me llamó… y supe que había muerto… no lo sé… lloré, me angustie pero… no puedo justificar sus acciones, nada del terrible mal que hizo... pero también lo comprendo…  ¿Me entiendes, Caroline? ―Lloró y me esforcé por no hacerlo también, suficientes lágrimas ya se estaban derramando por hoy―. No odio a esa mujer… pero… ella… ella… lo mató. ¡Y él también se convirtió en un asesino! 

Levanté mi mano y coloqué la palma en su hombro. Iris me miró unos instantes, antes de regresar la vista al camino. Estaba ausente, con la mirada triste. Le sonreí y ella me respondió de la misma manera, negando con su cabeza.

―Vaya nochecita… ―susurró en un débil intento de humor.

―Ni que lo digas ―completé.

Cuando estuvimos todos en la comisaria, imaginé con pesar que empezaba a acostumbrarme a ese lugar. Durante los interrogatorios, las pláticas, el café caliente y los brazos de mi madre que asustada había llegado, mantuve un gusto amargo. Roberto todo ese tiempo permaneció callado, aunque permitió que lo abrazara.

Sabía que todo estaba llegando a su fin y pedí porque fuese uno bueno.


***


Una brisa de aire frío golpeó mi rostro con suavidad, casi como una caricia. Contemplé a mi alrededor y sonreí inevitablemente; había tantos árboles y tanto espacio abierto que fácilmente podría confundirse con un bosque, aunque la fuente hecha de mármol y las mujeres vestidas de blanco, acompañado a personas tomándolas del brazo o empujándolas en una silla de ruedas, me recordaba donde estábamos: en un Centro de Salud Mental.

Pese a ese nombre, que a primeras instancias no podía escucharse muy agradable, el sitio sí lo era, además de que era ideal para la madre de Roberto, quien todo este tiempo había temido a los espacios cerrados debido. El asesino de Lorenzo Di Sttefano fue confirmado por ella: Vincent lo había efectuando; sin embargo esto no la libró del crimen que ella también cometió... pero claramente por el estado de salud en el que se encontraba, en lugar de ser enviada a la cárcel por aquella tragedia, primeramente  se le considero enviarla a otro centro más cerrado. Gracias al poder que recién había adquirido al heredar el imperio de su padre, Roberto consiguió que fuese enviada a este lugar.

Si bien ella podrá salir hasta que sea tratada adecuadamente (se calculan algunos años de por medio),  en los seis meses que ha habitado este lugar no ha dado muestras de molestia. Sonreí cuando vi a Roberto y a su madre sentados en una mesa lejana, tomados de la mano y hablando. Me era difícil creer que ya había pasado medio año desde aquella noche, donde esta mujer estuvo a punto de matarse.

Parpadeé lentamente cuando madre e hijo se giraron para mirarme. Me sonrojé intensamente cuando comprendí que ya le había dado la noticia y con un gesto de la mano, Roberto me invitó a acercarme con ellos. Mientras caminaba, pensé en mi amiga Iris, quien durante este tiempo había estado algo deprimida por la muerte de Vincent, culpable por no haber podido hacer algo con su odio pese a que estaba al tanto de ello; sin embargo, me llené de alegría cuando me di cuenta de que algo la estaba empujando a salir adelante y era precisamente Víctor, el pequeño hijo de Carla, al cual había adoptado como su querido sobrino y él parecía corresponderle en ese cariño fraternal que sólo un bebé sabía dar.

Mientras más me acercaba a Roberto y a su madre, me vi riendo cuando recordé el momento en el que, con gran sorpresa y entusiasmo, descubrí que Michael y Carla empezaron a salir juntos; Iris fue quien los había presentado y al parecer, ambos congeniaron muy bien. También el pequeño Victor ahora crece con la protección de su hermano mayor, Roberto. Eran buenas noticias. No pude imaginarme final más feliz tanto para mi amiga, como para ellos, quien merecían felicidad después de los todos nos vimos obligados a pasar.

Estiré mi mano lentamente cuando Roberto alzó la suya. Me sonrió tiernamente y yo asentí cuando él beso mi mano, específicamente el dedo en el que portaba un anillo de compromiso.

―¡Me da tanto gusto por vosotros! ―exclamó la mamá de Roberto, mirándonos a ambos con esa ternura que sólo una madre podría ofrecer―. ¡Tienen que venir a visitarme antes o después de la ceremonia! ¡Se los ordeno!

Reí cuando me senté a un lado de Roberto. Él vestía formalmente, sabía que tenía una reunión en la oficina después de esto.

―Aunque Caroline no quiere que la boda sea pronto… ―dijo él, haciendo una mueca que nos hizo reír a ambas, ya que contrastaba demasiado con la seriedad de su traje―. Yo digo que en cuanto más pronto, mejor. El destino es el destino.

―Déjame terminar primero mis estudios ―aclaré―, después piensa en todo lo que quieras.

―Mientras tenga nietos, yo seré feliz… ―comentó su madre. Eso me hizo sonrojar fuertemente al tiempo que Roberto se reía con descaro.

―¡Y los tendrás mamá, los tendrás!

Aún sigo sorprendida de cómo cambió mi vida aquella primera vez que vi a Roberto. Creo que cuando dos personas están destinadas a encontrarse y compartir su vida, se les ponen pruebas que deben aprender a enfrentar juntos. Sé que suena cursi, pero aprendí eso estando con él.  Es algo misterioso, pero a la vez maravilloso. Es algo que no sólo sucede en la ficción.
Se dice que hay una misteriosa red que entrelaza a todas las personas para que sus caminos se unan…

―Te amo, Caroline… ―dijo Roberto, acariciándome el rostro. Yo sonreí, feliz de poder decirle sin problemas, aquello que estaba alojado en mi corazón.

―Te amo, Roberto.

…yo le llamo el Hilo Rojo del Destino. 

FIN